El diario Valencia Plaza ha publicado un artículo de Ignacio Soler, secretario de la Asociación Valenciana de Fundaciones, por el Día Europeo de Fundaciones y Donantes celebrado el 1 de octubre. El objetivo de este día es unir a fundaciones y donantes de toda Europa para potenciar el conocimiento y reconocimiento del sector fundacional y de la filantropía en el desarrollo de la sociedad.
Bajo el título “Las Fundaciones reivindican el apoyo al mecenazgo en España”, Ignacio Soler destaca la importancia de difundir la labor de las fundaciones y reivindicar su papel en la sociedad como uno de los principales motores que contribuyen al desarrollo, el bienestar social, medioambiental y económico de los países. En el artículo señala que, este año, la celebración del Día Europeo de Fundaciones y Donantes adquiere un significado especial por el debate que se producirá el 17 de octubre en el Congreso de e los Diputados sobre la reforma de la Ley de Mecenazgo.
“La Asociación Valenciana de Fundaciones (AVF), junto a otras entidades del Tercer Sector, ha apoyado un “Manifiesto por la Filantropía. El Mecenazgo no puede esperar más”, por el que solicita al Gobierno tener un marco jurídico favorable y estable en materia de incentivos fiscales, que ayude a aumentar la filantropía en nuestro país y, como mínimo, situarla en el nivel medio europeo. Se pretende impulsar la reforma de la Ley de Mecenazgo, cuyo trámite parlamentario está paralizado, pese a contar con el apoyo de la mayoría de los grupos parlamentarios”, señala Ignacio Soler.
El secretario de la Asociación Valenciana de Fundaciones destaca tres puntos clave: cómo las entidades que conforman el Tercer Sector están desempeñando un papel cada vez más relevante en las sociedades desarrolladas, cómo la pandemia y el conflicto bélico en Ucrania han reforzado todavía más las acciones sociales de las entidades no lucrativas y la reivindicación de que los poderes públicos apoyen más al sector fundacional.
“Los políticos que nos gobiernan, así como los que nos gobiernen en un futuro, no deben olvidar la destacada labor que estas organizaciones están desarrollando en el día a día, y la beneficiosa función que en el futuro pueden cumplir para el progreso y bienestar social, por lo que resulta inaceptable que el sector fundacional sea un mero objeto de promesas electorales incumplidas”, explica Ignacio.
