El Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de València, ha iniciado un estudio para identificar donantes de linfocitos NK (del inglés Natural Killer) que faciliten la recuperación de la inmunidad en pacientes receptores de un trasplante alogénico de progenitores hematopoyéticos, también conocido como trasplante de médula ósea.
La investigación ‘Expansión de linfocitos NK para inmunoterapia de pacientes receptores de un trasplante alogénico de progenitores hematopoyéticos u órgano sólido’, que se inició en enero de 2022 y tiene una duración prevista de 3 años, se está realizando bajo la dirección del Dr. Carlos Solano, coordinador del Grupo de Investigación en Trasplante Hematopoyético de INCLIVA y jefe del Servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital Clínico. Recientemente ha obtenido una ayuda predoctoral de la Asociación Española Contra el Cáncer en València para Rut Meseguer, graduada en Biotecnología y en el Máster de Investigación Biomédica por la Universitat de València, que se ha incorporado al equipo del Dr. Solano. La ayuda concedida para 36 meses, prorrogable a 12 meses adicionales, es de 22.000 euros anuales.
Se trata de un proyecto multicéntrico –que se desarrollará en el laboratorio del Servicio de Hematología del Hospital Clínico, con la colaboración del Instituto de Investigación Sanitaria La Fe y del Centro de Transfusión de la Comunidad Valenciana- que tiene como objetivo el desarrollo de nuevas terapias celulares destinadas al tratamiento de pacientes con enfermedades hematológicas graves que hayan recibido un trasplante de progenitores hematopoyéticos.
Este tipo de trasplante es el único tratamiento curativo para algunas enfermedades hematológicas graves, como leucemias agudas, determinados linfomas y los síndromes mielodisplásicos. Habitualmente se recurre a donantes no emparentados adultos, unidades de cordón umbilical (CB) o familiares con distinto grado de compatibilidad, determinándose el grado de compatibilidad entre el donante de células madre y su receptor mediante el análisis de unas proteínas localizadas en la superficie de las células denominadas HLA (del inglés Human Leukocyte Antigen). Aunque si no se dispone de donantes compatibles, se pueden utilizar donantes parcialmente compatibles, el uso de donantes incompatibles dificulta la recuperación de la inmunidad del paciente y favorece infecciones graves y recaídas, por lo que se plantea la necesidad de buscar nuevas estrategias.
Los linfocitos son células del sistema inmunitario. Los linfocitos NK son ‘células asesinas’ naturales que forman parte del sistema inmunitario innato, es decir, se encuentran en la primera línea de defensa contra posibles infecciones o agresiones siendo capaces de atacar y destruir células tumorales o infectadas por virus sin requerir compatibilidad HLA. Se ha identificado que algunos donantes sanos son portadores de un tipo especial de linfocitos NK, denominados NKG2C, particularmente eficaces haciendo esta función.
A través de la actual investigación se pretende identificar a un conjunto de donantes sanos portadores de linfocitos NKG2C. A estos donantes se les realizarán extracciones sanguíneas a partir de las cuales se aislarán las células NKG2C y se cultivarán en el laboratorio favoreciendo su proliferación en un proceso denominado ‘proceso de expansión’. Los resultados se compararán con la expansión de otro tipo de linfocitos NK, denominados NKG2A, que suelen encontrarse más comúnmente en la población. También se compararán con una fuente de linfocitos NK alternativa a la sangre periférica como las unidades de cordón umbilical. Todo ello se realizará con la finalidad de comprobar que realmente los linfocitos NKG2C obtenidos de sangre periférica son más eficaces a la hora de atacar a las células anormales del cuerpo, caracterizando fenotípica y funcionalmente los productos celulares que generan.
A continuación, en un estudio posterior se extraerán linfocitos de los donantes seleccionados, se separarán las células NKG2C y se prepararán suficientes dosis como para tratar a 20-30 pacientes incluidos en un ensayo clínico donde se teste la seguridad y eficacia de este producto celular. Si se confirma la hipótesis de partida, la investigación tendrá un gran impacto en la sociedad en general, al poner a disposición del Sistema Nacional de Salud estas dosis, que podrán beneficiar a un elevado número de pacientes, incrementando su supervivencia tras el trasplante de médula ósea u órganos sólidos.