Capella de Ministrers ha publicado Alegoría del amor, un trabajo discográfico en el que la formación, dirigida por Carles Magraner, incluye una selección de piezas renacentistas del Cancionero del duque de Calabria o de Uppsala (Suecia) con obras a dos y tres voces, algunas de ellas instrumentales, bajo el título de Tonos de canto de órgano, que se configuran como ejercicios de composición alrededor de los modos gregorianos. El disco, que incluye 16 obras, es el número 69 de un grupo musical con 37 años de trayectoria artística y que está considerado como un referente nacional e internacional de la música histórica.
El cancionero fue recopilado en la corte de Fernando de Aragón, duque de Calabria, y la reina Germana de Foix, en Valencia, publicado en Venecia en 1556 por Girolamo Scotto, uno de los impresores más conocidos de su época; y fue hallado por el musicólogo, crítico musical, compositor y diplomático español Rafael Mitjana en la biblioteca de la Universidad de Uppsala en 1907. Se trata de una obra de pequeño tamaño y, a diferencia de la costumbre de la época, no contiene dedicatoria ni prólogo, lo que hace difícil conocer las circunstancias en que se realizó la recopilación.
El musicólogo Francesc Villanueva expone en el libreto que “aunque la historiografía ha dedicado muchas páginas a esta recopilación musical, diversas son las incógnitas que todavía persisten en torno a su gestación”, y destaca que “existe un consenso generalizado en vincular su repertorio con ese gran foco cultural que fue la corte virreinal valenciana de los duques de Calabria. Esta conexión fue establecida en 1958 por el filólogo Josep Romeu, quien por esta razón rebautizó la colección con el nombre de Cancionero del duque de Calabria, que convive en el presente con el de Cancionero de Uppsala”.
El doctor por la Universitat Politècnica de València considera que los virreyes del reino valenciano “crearon el escenario perfecto para que el Palacio del Real se convirtiera en un centro donde florecieron las letras y la música al calor de los concurridos encuentros aristocráticos”. Su afición a la música “motivó el mantenimiento de un grupo estable de músicos de excepcional magnitud y calidad, solo comparable con el del mismo emperador”.
Villanueva señala que el cancionero “sólo nos proporciona el nombre del compositor de una de las piezas, el flamenco Nicolás Gombert” pero concordancias musicales con otras fuentes “también permiten identificar como autores a dos maestros de la capilla del duque, Pedro de Pastrana y Bartolomé Cárceres, y a un tercer músico, Mateo Flecha”. Otro de los compositores “es el celebérrimo Cristóbal de Morales, cuya presencia en Valencia no está probada aunque su titulada Misa Valenciana y su presencia junto a Pastrana y Flecha en los dos últimos fascículos del denominado Cancionero de Barcelona podrían constituir indicios de ello”. El experto considera que “el disco es una espléndida oportunidad para explorar esa cara más oculta del famoso Cancionero de Uppsala y disfrutar de los tesoros que aún encierra”.
Recuperación del patrimonio musical
Carles Magraner asegura que “estamos muy satisfechos con este trabajo que culmina un árduo trabajo de investigación y recuperación del patrimonio musical valenciano y español en el Renacimiento”. El violagambista y musicólogo remarca que “el disco es un testimonio más del objetivo que persigue Capella de Ministrers en la recuperación y difusión de este legado que por su relevancia damos a conocer, y que esperamos sea del agrado de aficionados y melómanos”.
Magraner (vihuela de arco) ha contado con Beatriz Lafont (soprano), Fernando Marín (vihuela de arco) y Robert Cases (vihuela de mano y guitarra renacentista) para este cd, grabado en la Iglesia Santa María de Requena (Valencia), que se distribuye en más de 28 países y en numerosas plataformas de todo el mundo.